18 razones para agradecer

Gracias
Gracias por existir
Gracias por existir hace tanto tiempo
Gracias por existir en mi vida desde hace tiempo
Gracias por ser parte de mi pasado, mi presente y mi futuro
Gracias por haber cambiado mi vida para mejor, aunque todos piensen lo contrario
Gracias por haberme hecho reír y sonreír tantas veces
Gracias por haberme hecho llorar, siempre vale la pena
Gracias por tantas alegrías y tan pocas tristezas
Gracias por enseñarme y hacerme aprender
Gracias por darme la locura que me hace normal
Gracias por tanto talento, magia y fantasía
Gracias por haberme hecho soñar
Gracias por hacerme soñar hasta lo imposible
Gracias por devolverme hasta los sueños que ya había olvidado
Gracias por cumplir mis sueños
Gracias por todas las personas que me hiciste conocer
Gracias por hacer realidad incluso aquello que ni siquiera soñé

24 de Marzo: Día de la Memoria por la Verdad y Justicia

A 32 años del último Golpe Militar, La Otra Realidad conmemora este día mediante la historia de Irma Rojas, integrante de Madres de Plaza de Mayo en el inicio y desde 1983 se unió a las Abuelas para buscar a su sangre. Hoy, María Belén es la última nieta recuperada y juntas tratan de recuperar el tiempo perdido.

El 24 de marzo de 1976 el dolor, la oscuridad, el secuestro, la apropiación, la injusticia, el autoritarismo, la clandestinidad, el despotismo, el silencio, la impunidad, y otros factores se adueñaron de la historia argentina por siete años. Treinta mil hombres y mujeres desaparecidos a los que les sustrajeron su vida sin derecho o motivo alguno; más de quinientos bebes apropiados a los que no solo le robaron la posibilidad de ser criados por sus padres, sino que también su identidad; miles de exiliados por prohibir la libertad en su propio país. Todo eso y mucho más, como las consecuencias socioeconómicas, culturales y educativas que hoy padecemos los argentinos, son el legado que dejó el último Golpe Militar.
A principios de marzo de 2006, el Congreso Nacional aprobó la ley propuesta por el Poder Ejecutivo en el que se establece el 24 de marzo como feriado nacional debido al Día de la Memoria por la Verdad y Justicia.
“Cada aniversario del 24 de marzo es un dolor muy grande para el pueblo argentino, pero para nosotras, las Madres y Abuelas, mucho mas. Yo en esa época no tenía mucha información y se tapaba todo lo que pasaba. Hoy hay más libertades y más información a partir de las políticas sociales que se tomaron desde que Néstor Kirchner fue presidente”, admite Irma Rojas, integrante de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo.
Esa difusión permite, entre otras cuestiones, que muchos jóvenes de 25 a 32 años comiencen a sentir dudas sobre su identidad y se acerquen a su sede de la Ciudad de Buenos Aires (ubicada en Virrey Cevallos 592 P.B. 1) y a las del resto del país en busca de aquello que le robaron: su origen. “Vienen muchos chicos a averiguar sobre su identidad. Hoy son hombres y mujeres que se enteran que son adoptados y llegan para disipar sus dudas. Eso es lindo porque después de todo, las cosas que se hacen y los nietos van apareciendo”, reconoce Irma.
Ella es una de las Abuelas bendecidas con esta causa iniciada el 22 de octubre de 1977 con el solo objetivo de recuperar lo que les pertenecía: los hijos de sus hijos. María Belén apareció en junio de 2007 y todavía disfruta de las mieles del reencuentro: “A mi nieta la encontramos hace poco. Ella vive en Córdoba y viene cuando puede. Yo me preguntaba con quién estará ella y gracias a Dios tuve mucha suerte que a María Belén la crió una familia adoptiva que desde chiquita le dijeron la verdad y luego la empujaron a buscar su origen. Ella es muy cariñosa y enseguida se dio con nosotros. El día que la jueza María Servini de Cubría nos presentó se abalanzó a mi y me dijo “Abuela como quería abrazarte””.
A pesar de tantos años de sufrimiento, angustia y vacío, Irma tenía la esperanza de encontrar a su nieta. “Esa era mi vida. Esa es la alegría que tengo yo hoy por haberla recuperado a pesar de todo el dolor por la perdida de mi hijo y de mi nuera. Ahora vino el consuelo para mí y toda mi familia”, reconoce.
Sin embargo, y considerando lo que significa encontrar parte de tu historia, Irma acepta que su vida cambió el 13 de mayo de 1977 cuando los militares entraron a la casa de su hijo, Horacio Antonio Altamiranda, y junto a él se llevaron a su nuera embarazada de 7 meses, Rosa Luján Taranto.
En ese momento, Irma trabajaba para ayudar a su marido en la crianza de sus nueve hijos. Tenía miedo y solo andaba por la calle por las necesidades de la vida cotidiana.
Sabía que Horacio militaba, pero jamás se imaginó cuál sería su final. Desde el momento de su desaparición, la valentía apareció como la amiga inseparable para el resto de su vida: “El miedo se me fue y me vino el coraje. Siempre dije que mi hijo y mi nuera desde donde están, me están empujando. Yo salí, recorrí sola iglesias, hospitales, comisarías, cárceles, ejércitos, embajadas, todo con la foto de ellos y con mis lágrimas. Yo creía que mi hijo estaría preso, pero no que lo torturarían o matarían, o como está, que ninguna de las Mamás sabemos dónde están nuestros hijos, si están muertos, enterrados, y ese es el dolor que uno lleva todavía”.
Como si fuera poco, mas pruebas aparecían en el camino de Irma. Tras la desaparición de Horacio y Rosa, ella quedó a cargo de los dos primeros hijos del matrimonio: un nene de 3 y una nena de 2 años. Ellos llevaban todo el peso de la historia, y fue el varón el triste testigo del peor momento. Esa imagen no se pudo borrar de su mente y así entró en la drogadicción, no habiendo psicólogo ni psiquiatra que pudiera sacarle esa angustia que llevaba dentro: murió a los 27 años. “Como yo digo esta gente, por decirle gente, me han sacado a mi hijo, a mi nuera y también a mi nieto. Él me decía que no sufriera por él, porque ya no quería vivir ya que no tenía a su mamá y a su papá. Me destrozaron la vida”, recuerda hoy con todo el padecimiento.
Este 24 de marzo de 2008 tuvo una sensación diferente para Irma Rojas. La aparición de su nieta María Belén, marcó para siempre una vez más su vida: “Ser madre de un desaparecido es un dolor muy grande, una cosa que vos llevas toda la vida, es un hijo que te sacan. Horacio tenía 22 años, recién empezaba a vivir. Ser Abuela es mucho mas, porque si los nietos te piden las nubes, te subís al cielo y se la das”.

Las fechas clave en la vida de Irma Rojas

* El 13 de mayo de 1977 Tropas del Ejército secuestran a su hijo Horacio Altamiranda y su nuera Rosa Taranto.

*En 1982 conoce a Hebe de Bonafini y se suma a las Madres de Plaza de Mayo.

*En 1983 llega a Abuelas de Plaza de Mayo en busca del hijo de su hijo y su nuera.

*En 1985 se entera por Elena Alfaro (compañera de su nuera en el transcurso del cautiverio) que Rosa Taranto tuvo a su bebe por cesárea.

*El 29 de Junio de 2007, los análisis de ADN determinaron que María Belén era la hija de Rosa Luján Taranto y Horacio Antonio Altamiranda y nieta de Irma Rojas.

Nota Publicada en la Revista La Otra Realidad
Ejemplar Nº 6 - Abril de 2008

La noticia del año



La muerte de Néstor Kirchner fue la noticia más trascendental del año para la historia de la Argentina. El motivo es que, para la nueva generación de amantes de la política, a ellos se les murió su “Juan Domingo Perón”.
Pese a la sorpresa del hecho, las manifestaciones de dolor se extendieron a lo largo de toda el territorio nacional. Estas foto fue tomada en la Plaza de la República, en San Miguel de Tucumán, sitio que eligieron los tucumanos para expresar su dolor.

Siguiendo la luna


Cómo es pasar una noche juntando cartones.

La mayoría de los trabajadores se levantan con la salida del sol, se bañan, desayunan y van a sus trabajos, en general en el centro de la ciudad, para regresar en el atardecer. Sin embargo, hay otros cuyo círculo de tareas es completamente al revés: los cartoneros. Ellos dejan sus casas con los últimos vestigios de sol, se suben a los micros y mientras todos finalizaron sus obligaciones y dejan la ciudad, ellos empiezan las suyas recorriendo el camino contrario.
Masivamente surgieron en la década ’90, como consecuencia de las crisis económicas y sociales que vivió la Argentina. Luego de luchar contra los prejuicios de quienes se los cruzaban por la calle, de demostrarles a ciudadanos comunes y a los políticos que no eran delincuentes, lograron un reconocimiento digno pero que aún no abarca a los 6.346 cartoneros que recorren las calles de la Ciudad de Buenos Aires.
Marisa Aguilera tiene 26 años y es de Villa Fiorito, Lomas de Zamora. Vive con sus tres hijos, Alexis (6 años), Sebastián (3) y Thiago (1), y su mamá, ya que es la menor de cinco hermanos. Marisa ingresó al sistema de recuperadores urbanos (Ver Los Recuperadores) y de domingo a viernes se sube al micro de la cooperativa MTE (Movimiento de Trabajadores Excluidos). Llega a la plaza B. Houssay (lindera con la Facultad de Medicina) cerca de las 19, toma su carro del camión que sigue al micro y comienza su recorrido por la Avenida Santa Fe desde Larrea hasta Junín, en el barrio de Recoleta.

Ser Recuperador Urbano

La primera parada es un local de lencería femenina. Las refinadas vendedoras ya no se sorprenden con su visita y van en busca de las cajas separadas para ella. El camino sigue derecho por la Avenida Santa Fe, mientras Marisa esquiva los autos y colectivos que la rozan una y mil veces, con fortuna de que no la hayan lastimado. Entre Uriburu y Junín es donde tiene mayor trabajo. Pasadas las 20 los encargados de los edificios sacan las bolsas de basura y hacía allí va ella, sin los guantes que le otorgaron en su uniforme porque no son cómodos para trabajar, a separar y juntar lo que es reciclable, y lo que no dejarlo en el mismo lugar. “Ellos y los chicos de los negocios ya me conocen. Hace ocho años que hago la misma parada. Saben que yo trabajo y que soy limpia, no dejo todo tirado y, si por error hay algo en las cajas que es de ellos, lo devuelvo siempre”, cuenta mientras examina los residuos.
“Al principio no sabía qué me servía y qué no, pero lo fui aprendiendo. Incluso ahora ya hay cosas que no las toman como las botellas de la leche, tienen muchas en los depósitos y no vale la pena agarrarlas”, explica Marisa, quien empezó a cartonear a los 15 años cuando su papá perdió el trabajo, aunque solo la dejaron hacerlo por una semana. Con el tiempo tuvo que dejar de la escuela, sabiendo que sirve más estudiar que cartonear, pero consciente también de las necesidades. “Mi sueño es estudiar medicina y más obstetricia; me encantan los partos y miro todos los programas de televisión relacionados con esto”, se ilusiona.
Marisa roba saludos por cada vereda que pasa. Segura e independiente, reniega de pedir ayuda, aunque reconoce que hay veces que debe aceptarla porque el tamaño de su bolsón la dobla en altura y dimensiones. Lo que no permite es el maltrato de los conductores. “En general la gente me trata bien. A veces me miran un poco, pero ya me conocen y están acostumbrados. Desde que tengo el uniforme me tratan más respeto. Dicen que ahí va un cartonero registrado en la sociedad. No tuve más problemas ni siquiera con la policía”, confiesa.
A Marisa le gusta cartonear. Dice que es su trabajo y la manera que le da de comer a sus hijos. “Cuando me separé no quise que el padre de los chicos me pasara plata. A mis hijos no les falta nada. Yo tengo pies y manos, puedo trabajar”, explica al tiempo que revela que en muchas ocasiones buscó cambiar su ocupación, pero cuando llega, por ejemplo a los locales de la calle Santa Fe donde retira los cartones, no la emplean porque vive en una villa. “Yo quiero progresar. ¿Sabes cuántas veces quise salir de esto?”.
Luego de separar los residuos útiles de los que no lo son, debe regresar a la plaza Houssay, empujando o arrastrando el carro, antes de las 22 porque a esa hora el micro retorna a Fiorito. Al otro día, llega la tarea menos gustosa para Marisa: clasificar lo que consiguió la noche anterior para venderlo el sábado en el depósito, rogando de que no llueva para que no se le arruine lo que juntó.
¿Qué sueños tiene? “Me gustaría tener mi casa terminada, y educar mejor a mis hijos, que puedan seguir estudiando y que el día de mañana digan que su mamá se sacrificó por ellos”.

Ser Cartonera

Aida Rodríguez tiene 56 años. También es cartonera desde hace una década, pero aún no ingresó al sistema de recuperadores urbanos. “Yo no soy la única que aún no recibe el subsidio, como yo hay muchos cartoneros. Siempre prometen que va a salir un camión y que vamos a tener un sueldito, pero luego nada. No tengo ayuda de nadie de la política, que en tiempos de elecciones prometen todos. Yo tengo que trabajar para mi hijo”, dice desilusionada.
Aída comenzó a cartonear hace una década, cuando perdió su trabajo de costurera y se enteró que su hijo Hugo, con tan solo 8 meses, había contraído el virus HIV por una transfusión de sangre realizada en el hospital luego de una bronquiolitis. A partir de ese momento, encontró en el peregrinar de los cartones y papeles la única solución a su presente, con un hijo en brazos y con la vergüenza que le generaba revolver la basura. “Cuando empecé sufría un montón, pensaba que todo el mundo me miraba si yo agarra y revisaba las bolsas, no sabía cuál era el papel blanco, qué me servía. De a poco fui aprendiendo, preguntando a otros cartoneros”.
Su rutina empieza a las 12 del mediodía cuando sale con Hugo de su casa en Budge, Lomas de Zamora. Al llegar a la metrópoli porteña, juntos recorren la zona comprendida desde la intersección de Bartolomé Mitre y Azcuénaga hasta la Avenida Córdoba, aunque también trabaja entre Pasteur y Pueyrredón y algunos locales de Paraguay. Cerca de las 22, aguardan en la esquina de la Facultad de Medicina con el material discriminado para la llegada de la camioneta y vender lo recolectado en el día. “Ellos pagan $10 por 100 kilogramos de cartón, pero yo no llego a eso. A veces hago 150 kilos, los viernes son los días que mejor se trabaja”, revela Aída. Recién ahí, ya de madrugada, pueden regresar a casa con su hijo.
Al igual que Marisa, Aída y Hugo se ganaron el respeto y cariño de todos los vecinos y empleados de donde recogen los cartones. Incluso son los policías los primeros en aparecer cuando alguien va a molestarlos.
No importa si hace frío o calor: los cartoneros o los nuevos “recuperadores urbanos” salen en busca de los desechos de la sociedad para venderlos y vivir el día a día. A diferencia de la mayoría que busca el refugio del sol, ellos siguen a la luna a través de su camino.

Aída y Hugo
La historia de Aída Rodríguez tiene matices que la diferencian del resto de sus compañeros cartoneros. Ella camina las calles de la ciudad juntando cartones junto a Hugo, su hijo de 11 años enfermo del virus HIV.
“Pese a su enfermedad, él es un chico normal”, asegura su mamá, aunque admite que no les revela a todos sus secretos por la constante discriminación: “A Hugo lo discriminaron en el colegio, desde los seis años, por eso nunca pudo estudiar como el resto de los chicos. Tiene su maestra particular y rinde libre todos los años, está al mismo nivel que sus pares, pero me pregunta por qué no va a la escuela y yo no sé qué decirle”.
Hugo toma todos los días la medicación que le otorgan en el Hospital Muñiz, y aunque continúa en tratamiento, está bien. Sin embargo, ni siquiera los empleados de las farmacias donde retiran los cartones tienen la píldora que quita la tristeza: “A veces me dice que no quiere vivir más, que está cansado de tomar tantos remedios y que le duele la panza. Yo ahí me tengo que hacer la enojada y decirle que si a él le pasa algo yo tampoco quiero vivir más. Y como él no quiere que me muera, entonces toma la medicación”.
A pesar de los dolores del alma y el cansancio del cuerpo, Aída no baja los brazos y continúa luchando. Así aguarda que el próximo año Hugo pueda inscribirse en un colegio porteño y que haga la vida normal que el resto de los chicos de su edad: “Quisiera que fuera al colegio porque a él le gusta mucho. No importa si es en doble turno o en uno sólo, como él quiera, siempre lo que él quiera”.

Los Recuperadores
Recién en 2008, a más de cinco años de la promulgación de la ley que lo disponía, el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad de Buenos Aires formalizó a los “recuperadores urbanos” para que realicen sus tareas en condiciones de trabajo dignas, higiénicas, seguras y sin menores. Los primeros beneficiados fueron los cartoneros anotados en el Registro Único de Recuperadores nucleados en cooperativas; actualmente son 2085. Cada uno de ellos recibió las credenciales, la indumentaria que los identifica como “recuperadores urbanos” (con guantes incluidos, pero sin elementos cortantes), y la tarjeta de débito del Banco de la Ciudad para cobrar el incentivo de $370 que otorga el Gobierno Porteño, además de poder vender el material que recolectan cada noche.

Publicada en la revista “La Otra Realidad”
Ejemplar Nº 18 – octubre de 2009

Pelota de Trapo, una escuela de la vida


La Fundación Pelota de Trapo surgió hace 34 años con la idea de cuidar a los chicos mientras sus madres trabajaban. Sin embargo, el crecimiento de una infancia cada vez más pobre los obligó a ampliar sus proyectos. Hoy se ocupan del cuidado y la alimentación de cientos de pibes, pero además les enseñan un oficio y los educan para el futuro.

Todas las mañanas, cerca de las 8, la casa ubicada en la calle Santa Fe al 1500, del partido de Avellaneda, abre sus puertas a padres y chicos que aguardan ansiosos con la ilusión de comenzar un nuevo día de trabajo y aprendizaje.
Lázaro, un pequeño de once años, corre contento a buscar la pelota y reúne a sus amigos. Juntos inician un picadito. Pronto se acerca otra niña, Jesica, de su misma edad, quien comienza a hacer morisqueta frente a la cámara de fotos como jugando a ser modelo. Pronto las amigas se acercan a ella y siguen el juego, hasta que la voz de los maestros suena como una alarma que indica que es el momento de tomar el desayuno para luego empezar a estudiar. Así comienza un nuevo día en la Casa del Niño, refugio y sinónimo de contención en Avellaneda para los chicos que aguardan el regreso a sus hogares mientras sus padres trabajan y ellos no asisten al colegio. Pensado para chicos de 45 días a 14 años, forma parte de la Fundación Pelota de Trapo, creada por Alberto Morlachetti hace 34 años con el objetivo de contener a los primeros chicos de la calle que surgían luego del incremento de la desocupación en Buenos Aires.
Los años de dictadura y el avance del modelo capitalista agudizaron la crisis de los sectores más marginados de la sociedad a la vez que obligaron a Morlachetti a postergar por algún tiempo el sueño de construir una plaza donde antes había un potrero en el que los chicos se juntaban para jugar a la pelota. No obstante, ese potrero se convirtió en cimiento de algo maravilloso: el Hogar Pelota de Trapo y Juan Salvador Gaviota, donde concurren casi 80 chicos y adolescentes, muchos de los cuales están en situación de calle.
Poco a poco, y a medida que aumentaban la pobreza y la marginalidad en Argentina, también crecía la actividad de la Fundación para satisfacer esas necesidades ignoradas por el Estado. En la actualidad, tienen ocho programas diferentes para cubrir todos los aspectos de los niños y jóvenes: Hogares Pelota de Trapo y Juan Salvador Gaviota, la ya mencionada Casa de los Niños, la Agencia de Noticias, la Escuela de Talleres Gráficos Manchita, la Escuela de Panadería y Heladería Panipan, la Granja Azul, la Biblioteca Pelota de Trapo y la Escuela de Educadores Populares.
“La Fundación Pelota de Trapo esencialmente está conformada por niños, jóvenes y educadores que han decidido estar juntos para transformar el grupo en el que vivimos”, explica el director de la Casa de los Niños e integrante de la Fundación, Darío Cid, y agrega: “La Casa del Niño fue uno de los primeros proyectos y nació para atender a los hijos de las madres trabajadoras, en el contraturno del colegio, pero el país fue evolucionando para peor y en ese momento decidimos crear nuevos vínculos y construir un proyecto de vida diferente con los chicos”. Y eso es lo que están logrando con un sello particular, diferenciándose del resto de sus pares y estableciendo un paradigma en la contención de la infancia y la adolescencia.
La Casa de los Niños fue creada en contraposición a los comedores, que suelen alimentar a los chicos con polenta y fideos. Morlachetti se propuso desde los inicios darle a los niños la misma alimentación que a sus hijos: proteínas, fosforo, vitaminas, hidratos de carbono, frutas, verduras y el postre. A la alimentación se suman además el servicio médico y una propuesta pedagógica.
“El programa Casa de los Niños acompaña a la familia en la crianza de los chicos, ese es uno de los objetivos esenciales. Por supuesto que hoy la situación de muchas de las mamás es bastante compleja porque la exclusión y la pobreza no solamente se agrandan en cantidad sino también en profundidad”, relata Cid.
En el lugar no hay límites de edad para recibir a los nuevos participantes y tampoco existe esa condición para dejar de asistir al centro, sino que, el único requisito, una vez alcanzado cierta edad de madurez, es devolver a otros chicos aquello que ellos tuvieron cuando ingresaron transformándose en “educadores”. Si bien no hay restricciones para el ingreso, se prioriza aquel niño que esté más necesitado de contención y cuidado.
¿Qué se aprende en la Casa de los Niños? A ser buenas personas, responde sin dudar su director. Para el primer grupo, los recién nacidos y bebes, el objetivo es lograr su autonomía, fortalecer la alimentación y la estimulación para que crezcan con la fortaleza que necesitarán para el resto de sus vidas. En la primera parte de la niñez, los educadores se encargan de introducirlos en la lecto-escritura y en el mundo de las palabras, a través de los juegos y los cuentos, para que cuando ingresen a la escuela primaria sepan escribir su nombre, los colores, los números.
Luego llega el turno de enseñarles a trabajar con las manos, algo que les sirve como un aprendizaje previo para el mundo laboral. “Nosotros queremos que los chicos salgan con la inquietud de construir su identidad como trabajador, aún sin tener la necesidad de salir a trabajar, sino que se refleje en las pequeñas cosas del día: ordenar los juguetes antes de ir a comer, limpiar la biblioteca donde estudian, ese es el modo”, relata Darío.
También, la Fundación Pelota de Trapo tiene dos hogares de residencia permanente para sus chicos. Uno de ellos lleva el mismo nombre de la fundación y el otro se llama Juan Salvador Gaviota, ambos ubicados también en Avellaneda. Según Cid, los hogares “no son como los albergues de niños tradicionales, sino todo lo contrario”. Al llegar un nuevo chico a cualquiera de los dos hogares, se sabe que se quedará hasta que adquiera la edad suficiente para seguir su camino en la vida, en contraposición a los hogares de adopción o los institutos de menores. “Nosotros con puertas abiertas, con belleza, con ternura, fuimos la contracara del resto de los institutos”, relata Darío y agrega que “ellos crean un vínculo de amor y cariño para que el chico quiera estar aquí. El hogar no es solamente un techo, comida y cama. También es ternura y un proyecto de vida”.
El punto en común entre los Hogares y la Casa de los Niños es que sus integrantes pueden continuar en ambos lugares, incluso cuando ya hayan pasado la mayoría de edad. La manera en que continúan es bajo la figura de “colaboradores”, aquellos adultos que con amor, paciencia y ternura les enseñan a los menores cuál es el camino en la vida. Los educadores tienen un sueldo por su trabajo en cualquiera de los proyectos de la fundación. De esta manera, se aseguran la permanencia de ellos y no juegan con el azar del voluntariado, pudiendo generar un vínculo entre los educadores y los niños. Por otra parte, los educadores no están obligados a tener un título pedagógico, pero sí tienen que pasar por la Escuela de Educadores Populares, en la que intercambian los conocimientos de los pedagógicos tradicionales y la metodología que se usa en la Fundación Pelota de Trapo.
“Nosotros vamos construyendo los conocimientos científicos a partir de la realidad, es una propuesta muy diferente”, subraya el director de la Casa de los Niños.
La acción de la fundación también tiene aristas para el resto de la comunidad. Una de ellas es la Biblioteca Pelota de Trapo en la que los vecinos de la calle Uruguay al 200, también en Avellaneda, pueden tener acceso a múltiples ejemplares para seguir enriqueciendo su intelecto. El otro servicio abierto es la Granja Azul, un lugar alejado de la ciudad y cercano al campo, ubicado en Florencio Varela, Provincia de Buenos Aires. Allí, el salón, la pileta de natación, la cancha de fútbol y voleibol y el ambiente natural ayudan a sus visitantes a conectarse con un mundo desconocido para muchos. Este lugar fue creado y reconstruido por un grupo de niños y jóvenes con necesidades extremas, pese a sus cortas edades.
Para darles una alternativa para el futuro, La Fundación Pelota de Trapo cuenta con dos proyectos que les enseñan a los jóvenes oficios para desempeñarse una vez que dejen el establecimiento en cualquiera de sus proyectos.
La Escuela Talleres Gráficos Manchita es la imprenta en la que trabajan los jóvenes de la Fundación. “Allí los chicos adquieren el oficio de imprentero que actualmente se paga muy bien. La imprenta tiene una tecnología bastante avanzada que tiene doble función: la de generar recursos para la obra de Pelota de Trapo, pero esencialmente formar jóvenes. Todos los pibes del hogar que han pasado por la imprenta tienen trabajos dignos, muy bien rentados y están insertos en otras imprentas, ninguno ha fracasado”, asegura con orgullo.
El otro proyecto es la Escuela Panadería y Heladería Panipan. El oficio de pastelero también es uno de los mejores rentados por estos días. “Para Pelota de Trapo, Panipan es un emprendimiento muy importante: ahí producimos pan, facturas y todo lo que consumimos en los Hogares y Casa de los Niños”, recuerda Cid y cuenta que el inicio se produjo con el afán de alimentar a los chicos. Sin quererlo, junto a la panadería surgió otro proyecto paralelo: una heladería. “El helado fue una idea de Leonor Mita, otra de las fundadoras de Pelota de Trapo, porque muchos de nuestros chicos no estaban acostumbrados a tomar leche por eso la rechazan cuando se la dábamos aquí. Por eso, les damos helado para que la consuman con algo que sí les gusta”, expresa el director de la Casa de los Niños.
En tanto, la agencia de noticias Pelota de Trapo es el octavo proyecto de la Fundación. Su creación fue para contrarrestar el imaginario colectivo y cambiar el enfoque de ciertas noticias. “El objetivo de la agencia es explicar y desnaturalizar los hechos que los medios de comunicación y la política naturalizan, como por ejemplo el hambre”, sostiene Cid. En la agencia escriben múltiples colaboradores, pero se destaca la labor de Alberto Morlachetti, el fundador de toda la obra.
“Todo esto se fue haciendo como se hace con cada uno de estos emprendimientos: puchito a puchito. Esto empezó siendo un potrero y con choripaneada, rifas y demás se fueron juntando fondos para llegar a todo lo que tenemos hoy”, relata Darío Cid. Si bien, La Fundación Pelota de Trapo recibe becas del Estado que cubre el 40% de los gastos de los proyectos, el resto de los ingresos surgen de la actividad de la imprenta y la panadería, además de las donaciones que reciben para cambiar la realidad y el futuro de más de 400 chicos.
Desde Pelota de Trapo, lo difícil se hace sencillo y lo complicado se resuelve de una sola manera: con amor. Esa es la filosofía que emplean cada día, y de este modo, llenan de colores el negro horizonte que tienen muchos niños y jóvenes de la Argentina. Ni bien entran en esta casa de Avellaneda saben que existe algo mejor, las puertas de un futuro posible se les han abierto y está todo por construir.

Publicada en la revista “La Otra Realidad”
Ejemplar Nº 22 – abril de 2010

GABRIEL COPOLA: The Picture of Table Tennis


He is one of the most important players in Class 3. While he leaves to be a promise to become a reality, he fights to have a place to first time to Paralympic Games and to fulfill his dream. But this is not the one: he studies to be a sport teacher and he teaches table tennis in a small school.

Who is Gabriel Copola? “It is too difficult for me to define myself, but I am a boy to fight everything in my life, I try to follow the road although the score would be right or wrong”. It is only a short picture about him. Gabriel Copola is 23 years old and he is one of the most important table tennis wheelchair players in Argentina.
Although he is very young, he is the leader in Class 3, and it is not because Victor Brandoli, one of his sports idols, decided not to continuous in the sports, it is for his winning lineage and unavoidable talent.
In addition to be a special person in the sport, he translates this “angel” to his life: loved, deared and well respected for the other players, coaches, study partners and all his family.
His history started thanks to Adriana Craffk and Miguel Copola. When he was a child, he showed his abilities to sports while he dreamt of becoming a number nine Boca Juniors’ football player. However, when he was 12, he had an accident on his bycicle and consequently, he is in a wheelchair. In this moment, he did not think that this was the end, on the other hand, it was the beginning of a new life.
“The first day in my wheelchair I felt estranges, but there were different things that helped me: the family, the table tennis, my friends. All these helped me to feel better, so I could do what I wanted and I forgot the wheelchair”, confesses Copola something that he believes unexplained. Moreover, he reveals that his life has not changed since he had the accident, because before the accident he did sports and now he is still doing them; he was talkative in the primary school, and today he is at the university. The only thing that changed was that he watches the things since his wheelchair. However, he states that this fact was education: “the difference is that I learnt to reflect a little more all things. In that moment, I was a child and I did not think and for this I had the accident. This blow did that I reflected, although sometimes I continue doing the things for the impulse that I had in my blood”.
This personality goes him to be perfect. From he started with Wheelchair Table Tennis, and he came to National Team, he is one of the assurance players in every training. This sacrifice derives in to travel around the world representing to Argentina. If he had not had the accident, would he have been an elite’s sportsman?
“It is not easy to talk about that what would been happened, to me, I was the best footballer, but today it is that I have and I am so proud about this. All day I answer to me if I had managed that I managed and this gave me the sport. I love it, is a pleasure to me to play Table Tennis. If one day it sports does not like anymore and it does not enjoy me in training, I will not continues with this. But now, I am funny and happy to do it”, confesses the protagonist, thanked about Table Tennis and he showing that the love to sports does not have any barriers.
With solidary soul, he wanted to share his experience of life with other people and to transmit them that he had lived. He studied to become a physical education teacher at La Matanza University since 2004. Two years later, he was the teacher of development Table Tennis Scholl from FADeSiR (Argentina Wheelchair Sport Federation): “One of thing that I want to teach the pupils is all I did in the sports, somebody can to live about this. I am so lucky because I work that I love it and not everybody can do it”.
At the moment, Gabriel is fighting to qualify for Paralympic Games Beijing 2008. But he chooses particularly weapons: “temperament, heart and personality”, although he states that he is “learning to balance because he must use the head and the heart”. In this combat to go for first time in his life to the most important paralympic competition in Asia, he will be end in number thirty place in the world ranking.
“Today Beijing does not let me sleep, today I am Beijing. Is my dream come to Paralympic Game, I am so tired that other people come back of this tournament and I could not live this. All sportsman wishes to go to Paralympic Games, there go the best players in the world, and I want to show everybody that I am a good player”, confesses self-seeker of glory. Satisfaction that, in his opinion, he can not manage in Rio de Janeiro, Brazil, during the third Parapanamerican Games, because the pressure that himself put in this championship. But the number said that, in Class 3, he is the fourth in the ranking and he ended in this position in this tournament.
However, this disappointment does not change his feelings about this sport. “The Table Tennis I have it in my heart and my soul. It is an incredible sport, which you can learn the tactics, but it is a mental sport. It helps to drizzle you, although the players are a little crazy. The Table Tennis is all Gabriel Copola, and Gabriel Copola is all Table Tennis”, it is his best illustration.

Nota de Tapa de Revista RETO
Nº XXII - 30 de noviembre de 2007

“No pienso en ser jefe de Gobierno, porque esas cosas te hacen perder el norte”

Con apenas 33 años, Fernando de Andreis encabeza la lista de candidatos a ocupar una banca en la Legislatura Porteña por Unión PRO. Legislador desde 2007, afirma que su posición se debe a que su espacio “apuesta por la gente joven”. Sobre los conflictos docentes, dice que “el tipo que no labura, no corresponde que cobre”. Y promete atender los reclamos de autonomía y seguridad de los vecinos.

¿Cómo se enteró que iba a encabezar la lista?
En los días previos se barajaba la posibilidad. Yo estaba en una oficina de la Jefatura de Gobierno trabajando en la presentación de las listas, sin los nombres. Entró Mauricio (Macri) a la oficina, me miró y me dijo: “ahora a laburar, sé que lo vas a hacer muy bien así que dale para adelante”. Le contesté que nadie me había dicho nada, sólo me había cruzado con Horacio (Rodríguez Larreta) y Marcos (Peña) y se reían. “Es que lo tenía que decir yo, vas a encabezar y ponete a laburar”. Cerró la puerta y se fue. Ahí me quedé pensando eso.
¿Lo sorprendió?
Sí. Aunque era una posibilidad, recién cuando te lo confirman te cae la ficha, y en algún punto fue una gran sorpresa.
¿Le pesa la responsabilidad?
Sí, por supuesto, pero es una responsabilidad muy agradable. Es un desafío muy importante para mí y me siento muy honrado con que hayan depositado esa confianza en mí.
¿Por qué cree que Macri confía en usted?
Este es un espacio que apuesta por gente joven, por la renovación de la política y sé que tiene que ver con una coherencia en el armado de las listas que venimos presentando desde el año 2003 hasta ahora. En el año 2003 encabezaba Gabriela, que en ese momento no era conocida; en 2005 Marcos Peña, que tenía menos de 30 años; en el 2007 Mariano Narodowski, que también era un tipo nuevo en la política y mucha gente no lo conocía. Es una coherencia de apostar por gente nueva, que tiene otra manera de hacer política y con la idea de renovar la política en la ciudad.
¿Lo condiciona en su accionar político su relación familiar con Macri?
Es que yo no tengo relación familiar con Mauricio.
Es el medio hermano de su primera esposa…
Pero él se volvió a casar, después de esa segunda mujer tuvo otra pareja más. Tuve una relación familiar en su momento, hoy no la tengo. Y, dicho por él, eso no me jugaba a favor porque de alguien que conoce de hace mucho como a mí, espera mas y es más exigente que con cualquier otra persona. Yo eso lo sentí, pero lo tomé como un gran desafío y me llevó a estar donde estoy hoy.
¿Es un punto de especulación para la oposición su vínculo familiar con Macri?
Sí, pero la gran mayoría se enteró de esto recién ahora, ya que encabezar la lista me hizo ser más mediatico. Yo llegué a ser diputado y a desarrollar mi trabajo en la Legislatura y nadie sabía eso. De los que me conocen de la oposición, nadie siquiera me lo sugirió, así que no creo que pase por ahí.

Apoyar la gestión

¿Cuáles son los proyectos que están pendientes en la Legislatura?
Son varios y están relacionados con apoyar la gestión. La ley de pliegos de los contratos de basura, la de financiamiento, la de aceites vegetales, la de educación, vamos a insistir con el voto electrónico, la boleta única, lo relacionado con la reforma política. Muchísimos proyectos que todavía faltan sancionar.
¿No estuvo demasiado centrado en lo económico el proyecto de ley para la subasta pública de los terrenos en Catalinas Norte?
No, porque tenemos a la estación de servicio que pagaban un canon de 11000 pesos por mes en terrenos ociosos para la ciudad que valen 330 millones de pesos y que dejaban muy poca plata. Ahora, en vez de tener (el dinero) parado en un solo lugar, vamos a tener casi 50 escuelas nuevas y yo como vecino de la ciudad prefiero eso.
¿Está de acuerdo con que se le descuente del sueldo a los docentes que hacen paro?
Sí, por supuesto.
¿Y el derecho a huelga?
También, pero una cosa no tiene nada que ver con la otra. A mí lo que me llama la atención es que estemos discutiendo cuestiones tan básicas como si corresponde o no que a la persona que no trabaja se le pague. Yo eso lo tengo saldado hace muchos años. El tipo que no labura no corresponde que cobre, porque es muy injusto para el que labura. Acá los más perjudicados por las medidas que toman son los mismos docentes que tienen que salir a cubrirlos. Yo recorro mucho las escuelas y los docentes piden que seamos inflexibles con los que no trabajan. Son ellos los más perjudicados cuando alguien no se presenta a trabajar, porque tienen que poner la cara con los chicos. Entonces tener compañeros que no van a trabajar y que cobren igual es muy injusto.

En campaña

¿Qué otras cuestiones le reclaman los vecinos de la ciudad?
Cuestiones relacionadas con la autonomía y la inseguridad. Estamos invirtiendo mucho tiempo, dinero y decisión política en esos temas, y es en lo que vamos a avanzar en los próximos dos años.
¿Cómo vive es hacer campaña junto a Gabriela Michetti?
Es un placer, porque Gabriela es una persona que tiene mucha fuerza, una valentía impresionante, genera algo que es con lo que a mí me gusta trabajar que es el diálogo directo con el vecino. Los pedidos los hacen de una buena manera si generas un vínculo con la gente y eso es lo que logra una persona como Gabriela.
¿Está pendiente de las encuestas?
No, no estoy pendiente, pero no porque no me importe sino porque las encuesta son muy volátiles. Prefiero el termómetro de la gente en la calle y lo que más me importa es el resultado del 28 y la expresión de las personas.
¿Qué significa la política en su vida?
(Se lo pregunta asimismo una y otra vez) Es lo que me da la posibilidad de hacer lo que más me gusta, es la herramienta que tengo para colaborar para la transformación de la vida de la gente. Eso se ha ido incrementando a lo largo de mi vida política, y la verdad que eso me hace sentir muy bien.
¿Cuáles son sus máximas aspiraciones?
Que cuando deje de participar activamente en política, se me recuerde como alguien que le hizo un bien al país y como una buena persona.
¿No sueña con ser jefe de Gobierno o presidente de la Nación?
Sueño con seguir creciendo. Trato de no ponerme esas metas porque eso hace que uno pierda el norte y no tenga los pies sobre la tierra. En vez de pensar a dónde quiero llegar, trato de preguntarme porqué me involucré en la política que tiene que ver con el servir, lo demás viene y la vida te va llevando. Soy de los que creen que uno está en los lugares que está porque es donde mejor puede aportar, eso me deja tranquilo porque hasta ahora me ha ido muy bien.

“La de Ibarra es una denuncia berreta”

En el tramo final de la campaña, de Andreis fue acusado por Aníbal Ibarra de votar durante 2008 varias leyes en la Legislatura Porteña en nombre de sus compañeros.

¿Qué responde a las denuncias y acusaciones que hizo Aníbal Ibarra?
El tema surgió el año pasado. Reconozco que en la Legislatura estábamos trabajando en un clima de informalidad que no era bueno, pero que fue resuelto por el vicepresidente primero, Diego Santilli, a partir de los convenios con la universidad para comprar un nuevo sistema que evita esa informalidad que veníamos viviendo. Incluso una jueza, que tomó intervención, dijo que la votación es válida, que ni siquiera hubo un alejamiento del reglamento y por supuesto que no hubo delito. Los videos no los vi, pero lo que puedo decir es que, en un momento me acusan de votar por Marcelo Godoy, y los asistentes de él me dijeron que Marcelo está sentado en su banca. No me quiero detener mucho más en este tema, porque estoy absolutamente convencido que es un manotazo de ahogado de un tipo que está midiendo mal en todos lados, que está desesperado. Me genera una profunda desilusión que una persona como el doctor Ibarra, que fue electo dos veces jefe de Gobierno, lo único que pueda hacer en una campaña es este tipo de denuncias berretas y sin ningún tipo de sustento.
¿Esto repercutió negativamente en la campaña?
Por suerte, a partir de que está tan deslegitimada la figura de Aníbal Ibarra, sucedió todo lo contrario. Los vecinos me daban fuerzas. Todo el mundo entendió que fue una maniobra política de campaña.

¿Quién es?

Nació en Palermo el 10 de enero de 1976. Tiene 33 años.
Es Licenciado en Administración de Empresas por la Universidad Nacional de Buenos Aires, recibido en 2006. Eligió la universidad pública “porque te da el baño de realidad para insertarte en el mercado laboral”.
En la Legislatura es vicepresidente de la Comisión de Educación.
Es soltero y no tiene hijos.
Disfruta de jugar a la pelota a paleta y al fútbol. Es hincha de River Plate.
La lectura es uno de sus hobbies. Entre sus preferencias, se encuentran los libros de historia argentina y las novelas basadas en hechos reales. “Entre mi hijo y yo, la luna”, de Carlos Páez Vilaro, fue el último ejemplar que leyó.

Reportaje publicado en la Revista NCN
Nº VI - Junio de 2009

Soy tu fan


Llantos, gritos y amores incondicionales, denominados por muchos como histeria, son las características de la relación de algunas teenagers con sus ídolos. Pero, ¿qué pasa con ese fanatismo cuando ya no es propiedad exclusiva de las adolescentes? ¿Es un signo de inmadurez pasar los 25 y seguir a tu ídolo a sol y a sombra? Un intento de entender esta idolatría desde el punto de vista de dos generaciones: las seguidoras de los Backstreet Boys, y las de Sandro.

Guardar el chicle de su ídolo, como si fuera el tesoro más preciado del mundo; esperar horas y horas en la puerta de un hotel sólo para ver su sombra; acampar días en la entrada de un estadio para ocupar el lugar de privilegio en el show; sostener un cartel en la autopista en un día de lluvia solo para despedir a sus cantantes favoritos; ahorrar dinero, fortuna y no tanto, para invertirlo en fotos, revistas, figuritas y demás; acumular millas en viajes y gastar unos 10.000 dólares para presenciar sus conciertos y pruebas de sonidos; esas y muchas cosas más son capaces de hacer las “teenagers” por sus ídolos. Y no sólo las adolescentes. Muchas cuando crecen siguen con su idolatría intacta, pese a que ya no tienen 15 años.
Gabriela (25 años), Debora Delgado (27), Myriam Iglesias (30) y Denise De Girolamo (25) son las integrantes más emblemáticas del Fan’s Club Oficial de Backstreet Boys en Argentina y orgullosas admiten su fanatismo en la etapa de adultez, pero marcan la diferencia entre ellas y las jovencitas. “Otra persona vería mi admiración por BSB como un signo de inmadurez, pero yo sigo estudiando, trabajando, ahorrando plata para seguir viajando. Mi vida no ronda alrededor de ellos, como cuando era chica. Además nunca fui de gritar histérica cuando los veía, ni antes ni ahora”, confiesa Gabriela, mientras que Myriam agrega entre risas: “Yo soy inmadura y me encanta ser inmadura. En realidad, cada uno tiene su signo de inmadurez con algo. Creo que nosotras ya maduramos, pero también está bueno ser chiquito para siempre en algo”.
“Nuestra relación empezó por el Fan’s Club por el gusto en común por una banda, pero ahora somos muy buenas amigas, es otro nivel, va mucho más allá de los BSB”, explica Denise, al tiempo que Debora sentencia: “Es un signo que pone la sociedad porque yo soy inmadura porque me gustan los BSB, pero si me gustaran los Rolling Stones eso no se discutiría”.

Quiero llenarme de ti

Mabel Armentía es la fanática más ferviente que tiene Roberto Sánchez, o sea Sandro de América. Comenzó su admiración a los 11 años cuando vio al “Gitano” en la pantalla grande interpretando “Quiero llenarme de ti” y hoy, cuatro décadas después, sigue con su fidelidad intacta al punto que el ídolo la llama en sus cumpleaños para saludarla. ¿Ella es mucho más inmadura que las jovencitas? “Me han dicho tantas cosas en mi vida que ya ni me acuerdo, seguro que me lo habrán dicho. Si admiras a un artista porque es bueno, ¿qué tiene que ver eso con la madurez? Uno no se queda con que va a revolear la bombacha, tu vida la seguís adelante porque vos vas creciendo y tu ídolo también. Yo creo que no soy inmadura, pero habrá que preguntarle a un psicólogo”, responde orgullosa quien el título de fan número uno.
Y hacía allá fue La Otra Realidad. Mabel Sgrilletti es psicóloga social y mediadora, y con su opinión les da la derecha a todas las fanáticas, más allá de la edad que indique su documento de identidad. “Todos somos fanáticos de algo, sin distinción de edades, situación económica, social o cultural. Esto no significa nada malo, sino que sólo puede llegar a perjudicar a la persona en situaciones en las que su fanatismo las lleva a extremos peligrosos para ella”, explica Sgrilletti y recuerda el caso de la chica venezolana que se tiró de la tribuna de un estadio de fútbol para tocar a Leonel Messi cuando se dirigía a los vestuarios en la Copa América de 2007.

Así pasan los años

A pesar de que estas fanáticas son de diferentes generaciones, todas comparten ciertos parámetros en general que las identifican entre sí, más allá de las diferencias entre sus idolatrados, y las separan ampliamente de la nueva camada de seguidoras que hoy deliran por los Jonas Brothers o los argentinos Teen Angels. Las fans postmodernas están favorecidas por el avance tecnológico, el acceso a internet y la creación de las redes sociales (como facebook o twitter) que las acercan mucho más a sus ídolos.
Las de las década del ’90 encontraron en la Plaza San Martín el punto de reunión de todos los fan’s club, donde sus integrantes vendían y compraban el material que les sobraba de los otros artistas. Tres de las cuatro BSB’s fans se conocieron en ese sitio de Retiro y ese fue el puntapié inicial para crear el Club. “En ese momento teníamos tiempo y podíamos encargarnos de nuestras funciones como integrantes del Club: ayudar en la difusión del artista, enviar votos a las radios y canales de TV. También tuvimos que contactarnos con fanáticas de otros países”, específica Gabriela y Debora aclara: “Ahora el concepto de presidenta, vice, tesorera y secretaría quedó de lado. No tenemos esa estructura porque les damos el espacio a las nuevas integrantes y nos repartimos las tareas, aunque cuando tenemos que hablar con la discográfica vamos nosotras porque somos a las que más conocen”.
Aquellas que ya pasaron las cuatro décadas, y algunas más también, tuvieron la ventaja de no congregar tanta cantidad de socias en los Fan’s Club que le permitían un contacto más directo con el ídolo en cuestión. Sin embargo, en aquella época tenían las mismas características que diez años atrás, pero con un compromiso social adicional. “Yo me asocié en el año 1978, y además de seguir a Sandro, hacíamos donaciones a asilos, hospitales. Después se fue complicando por la situación económica y no podíamos tanto. En la actualidad, las integrantes nos seguimos reuniendo todos los meses”, agrega Mabel.
Desde el aspecto psicológico, la doctora Sgrilletti explica que “el pertenecer a un club de fans le da al fanático una localización y un punto de apoyo en el espacio externo”. Y estos son los motivos: “este fanatismo se integra bien con el mundo de estas personas: nunca se siente aislado ni extraño, pues siempre puede recurrir a algún par de su grupo para relacionarse, ya que obtiene identidad e integración, reforzando el fanatismo”.

Dónde jugarán las niñas

Como ya no son unas niñas, las fanáticas que ya dejaron la escuela secundaria hace rato lograron enfocar su vida, sin dejar su fanatismo, pero sin que éste le permitiera estancarse en una eterna adolescencia.
“Cuando yo empecé a ser fanática de Sandro no imaginaba serlo durante toda mi vida. El fanatismo lo viví como algo normal que me acompañó en las etapas de crecimiento, en los distintos momentos de mi vida”, relata Mabel, y enumera: “Estudié, tuve trabajos buenos, malos, estuve desocupada, tuve unos cuantos novios, me casé. Es un mito que las fans sólo vivimos para nuestro ídolo”.
En la actualidad, y desde hace un tiempo, las “Backstreet’s Girls” además de ser fanáticas y cumplir con esas tareas, fundamentalmente desarrollan sus actividades de la vida cotidiana. Gabriela y Myriam son hoteleras, Denise espera serlo cuando termine sus estudios de esa carrera, mientras trabaja en una empresa telefónica; y Debora es estudiante del profesorado del nivel inicial. Pese a que todas tienen sus sueños personales más allá de los Backstreet Boys, aún deben ratificarlo una y otra vez ante sus familias que todavía cuestionan sus fanatismos. Al unísono coinciden que, a pesar del reclamo de sus padres, son ellas mismas las que mantienen sus gastos y las que establecen conscientemente la distancia entre el artista y el fanático. “Ellos no son parte de mi familia”, afirman las chicas.

Amigos son los amigos

Aunque no haya parentesco con los ídolos, los fans siempre generan un vínculo de cariño con ellos afectándoles los acontecimientos positivos y negativos en sus vidas personales. Los ven como si fueran sus amigos y, como tales, les repercuten pesares y alegrías, sin que ello implique llevarlas al borde del éxtasis o de la depresión.
“Nosotras ya bajamos a los BSB del pedestal de ídolo a persona, son seres humanos como todos. Internet te da la posibilidad de contactarte con ellos y manifestarles tu apoyo ante las situaciones difíciles que vivieron, para que sea un incentivo saber cuántas personas quieren que estén bien, como felicitarlos ante los momentos felices”, confiesa Debora que como fan de los estadounidenses pasó operaciones, casamientos, nacimientos, adicciones y rehabilitaciones.
En ese aspecto, “las nenas de Sandro” tiene también experiencia: ellas vivieron sus amoríos y ahora les toca pasar junto al ídolo su delicado estado de salud. “Este momento lo vivimos con mucha preocupación, con angustia, pero somos conscientes que no podemos hacer nada, ojala pudiera hacer algo”, admite Mabel y revela: “cuando hablé con él la última vez, lo único que le pude ofrecer es mi sangre, ya que tengo el factor cero por si se necesita en el momento de la operación. Pero más que acompañarlo, estar cerca, rezar y pedir para que todo se solucione, no podemos hacer”.
“Yo lo único que quiero, no como fanática sino como persona, es que pronto pueda ser operado y que esté recuperándose. Ya no me importa si Sandro no vuelve a cantar”, admite con sinceridad.
En la definición psicológica de fanatismo se hace la equivalencia a la “pasión exacerbada e irracional hacía algo o hacía alguien”. Y cuando se habla de “pasión” es ineludible hablar de amor, de fantasías y de casamientos. ¿Éstas fans seguirán deseando casarse con sus ídolos?
En este aspecto, la única que reconoció que en su cuento de hadas estaba escrito el matrimonio con su admirado fue Debora: “Yo cuando era chica soñaba que estaba casada con Kevin Richardson (integrante de los BSB hasta el año 2006), me recortaba a mí y la pegaba junto a su imagen”. Sus compañeras estallaron de la risa.
Te tiraré del altar

La sandróloga Mabel jura que nunca soñó con llegar al altar de la mano del “Gitano”, pero también aclara que: “si él me ofrecía algo, yo agarraba”.
“En nuestra cultura occidental nos sorprendemos de lo que a veces el fanatismo puede llegar a producir, como los seguidores a muerte” expresa Sgrilletti y el asesinato de John Lennon por su fanático Mark Chapman es el fiel reflejo. Hasta el momento, por supuesto que estas fanáticas no llegaron a ese extremo. Sin embargo, y pese a que las cinco se separan de “las locas histéricas que gritan y tiran bombachas y corpiños”, tampoco son tan santitas y tienen en su haber varias locuras que las identifican como “locas fanáticas”.
En ese aspecto, la más osada y jugada fue Gabriela que viajó hasta Alemania en 2008 para ver el concierto de Backstreet Boys “Unbreakable Tour” en tierras germanas. “Lo más loco que hice por seguirlos a ellos es gastar mucho dinero, no sé cuánto, pero mínimo diez mil dólares. Tengo un museo en mi casa. A mí me encanta viajar, y si bien el objetivo era ir a ver a los BSB, también aprovechaba para recorrer y conocer. Así me fui a Europa y voy a volver porque quedé fascinada”, revela todavía con brillo en los ojos. Claro, que semejante recorrido tuvo su recompensa: “La primera vez estaba muy nerviosa y lloré de la emoción de estar enfrente de ese ídolo que veía en la tele cuando tenía 15 años y que era muy lejano. Fue muy grato porque pude hablar con ellos y darme cuenta que además de buenos artistas, también son buenas personas. Después fui a otro recital y que el tipo te vea y te salude con la mano, es increíble eso”.
Myriam también tuvo su experiencia europea con los “boys”, pero con algunas diferencias. Ella estaba trabajando en Inglaterra y cuando se enteró que sus ídolos se presentarían en Londres no dudo en viajar hacía allí para asistir al concierto. “El día del recital fui a la puerta del hotel sin esperanzas porque, en realidad no tenes expectativas que salgan, y sin embargo vi salir a AJ (Alexander McLean). Aunque no pude sacarme fotos, me dio la mano y me saludó. Fue increíble, aunque tuve a Nick Carter al lado y de la emoción no lo pude reconocer”, describe entre risas.
Por su parte, Mabel tiene mil anécdotas con el Gitano luego de 40 años de fidelidad incondicional, al punto que él la llama año a año para saludarla por su cumpleaños.
“Eso es espectacular, es tan lindo, tan emocionante. Uno piensa que una persona así de importante como Sandro no está pensando en sus fanáticas, menos ahora con todos los problemas de salud que tiene, y sin embargo también lo ha hecho”, recuerda Mabel.
Cualquiera podría decir que ese detalle es propio de los amigos, pero ella no lo considera de esa manera: “Decir amistad a mi relación con Roberto sería mucho, pero lo conocí en 1978. Lo seguíamos siempre a todos lados, así conocí muchos lugares gracias a seguirlo a él. Sandro siempre me trató muy bien, me tuvo mucho afecto, no sé, le habré caído simpática”.
“El admirador piensa y siente con el admirado, ama y odia con él, quiere y actúa en sintonía con él, todo lo que en el mundo salga de esa horma, es insignificante”, cierra Sgrilletti. Como se ve, es una horma resistente.

Publicada en la revista “La Otra Realidad”
Ejemplar Nº 14 – junio de 2009

Historias Paralelas


Guillermo Marro y José Meolans son los mejores nadadores argentinos tanto en la natación adaptada como en la convencional. Ambos comparten el inicio, los sacrificios, triunfos, records y la pasión por el agua. Sin embargo, cada uno tiene lo que al otro le falta: Marro ganó dos medallas paralímpicas, mientras que Meolans fue el primer y único campeón del mundo nacional en este deporte.

Guillermo Marro comenzó natación para seguir a sus hermanos y ahí el médico le recomendó este deporte como medio de rehabilitación. Los padres de José Meolans decidieron que aprendiera a nadar por el “miedo” que les generaba el río de enfrente de su casa en Carlos Paz. En ese momento, ambas familias no sabían que el destino de sus hijos cambiaría para siempre. Las condiciones y el talento que Marro y Meolans mostraron desde el inicio los llevó a dedicarse a pleno a la natación de alto rendimiento y a alzar la bandera argentina en múltiples competencias internacionales.
“Creo que sin el apoyo de mis hermanos y de mi familia no estaría donde estoy. Mi mamá me dijo que era un camino muy duro pero que si lo quería afrontar ellos me iban a apoyar, ellos tuvieron la llave principal para que yo me iniciara en esto” recuerda “El Mago” de Pergamino. “Sin duda la contención familiar es un porcentaje muy alto el que ocupa en lo que uno hace, junto al entrenador, los amigos, son varios factores que se tienen que conjugar para que uno tenga un incentivo y una motivación por lo que hace” admite el cordobés.
Junto al talento y las condiciones, las horas de entrenamiento, los millones de kilómetros debajo del agua y los tiempos alcanzados los depositaron en la elite de la natación sin importar los sacrificios que soportaron para alcanzar el sueño. Y en este aspecto, la historia para ambos también se repite: “Sacrificios son varios, creo que a José y a mí nos ha pasado de tener que venir a Buenos Aires y dejar todo atrás. Después el hecho de dejar el colegio, los amigos, la diversión, cosas que van sumando por un objetivo claro”. “Mi situación es muy similar a lo que dice Guillermo, me han pasado cosas muy parecidas por este deporte. Dentro de lo que fue la infancia, haces actividades muy diferentes a las de un chico que tiene una vida normal, que solamente estudia. Pero el deporte también te devuelve en otros aspectos ese sacrificio”.
Y vaya que la natación les devolvió el sacrificio a ambos, pudiendo cumplir además sueños como estar en un Mundial o representar al país en un Juego Olímpico o Paralímpico. A Marro, por ejemplo, las dos medallas paralímpicas en Sydney 2000 y Atenas 2004, junto a todas las que logró a nivel americano, lo ubicaron desde el inicio del siglo en el top del ranking internacional. Meolans, por su parte, fue el primer nadador nacional en consagrarse campeón del mundo sumado a las tres participaciones olímpicas consecutivas desde Atlanta 1996.
“Para mí es mas que gratificante haber ganado una medalla de plata y una de bronce. Es un sueño cumplido y, considerando que a un argentino le cuesta mas estar en un podio, es el doble de gratificante y te dan ganas de seguir entrenando para volver a estar en ese lugar” recuerda Guillermo.
Para José haber logrado el primer título mundial para Argentina “fue una sensación muy linda, fundamentalmente porque se compensa y se premia todo lo que uno hace. Y sí, es muy especial ser el primer campeón mundial argentino, pero también lo es representar a tu país en cada competencia, haber ganado un Juego Panamericano, llegar a semifinales de un Juego Olímpico. Es un deporte al cual estoy muy agradecido, me ha dado mucho a lo largo de estos años y estoy muy contento con mi carrera, que dentro de todo ha sido bastante regular” admite.
Considerando los resultados, la historia los señala como los mejores nadadores argentinos. Sin embargo, la humildad es otra virtud que ambos comparten, a pesar de sus pergaminos deportivos: “A mí no me gusta hablar ni de mejor ni de peor. Yo creo que ha habido grandes nadadores a lo largo de toda la historia de la natación argentina y hoy por hoy también los hay y me siento parte de esa camada que ha dado algo por este deporte a nivel nacional” se enorgullece Meolans. En cuanto a Marro, él solo se siente “el mejor” por todo lo que viene haciendo: “los resultados, el entrenamiento y la planificación que tengo de acá a Beijing”.
A pesar de lo logrado, ninguno de los dos se conforma con eso y continúan la preparación para los próximos compromisos internacionales: el Mundial de Natación, en Noviembre de 2006 para Marro y Marzo de 2007 para Meolans, y los Juegos de Beijing 2008 para ambos.
Con respecto al Mundial, Guillermo se esperanza y va por más: “Yo estoy con muchas expectativas y con ganas de bajar de nuevo las marcas, de batir un nuevo record parapanamericano y en lo posible, subir un escalón más en el podio y con toda la ilusión de poder traer una medalla de oro”. En tanto, José, más cauto, lo aguarda como una competencia mas: “Estoy con la misma expectativa de siempre, con responsabilidad, con trabajo y con esperanza. Uno espera siempre ese tipo de torneos con muchas ganas”.
En tanto, los Juegos de Beijing encontrará a estos nadadores con diferentes necesidades para cada uno: Marro deberá alcanzar la medalla que le falta: el oro; en tanto, Meolans, sabiendo que será su último olímpico, quiere “demostrarse a sí mismo” que puede estar en la final de esta competencia.
Pero sus metas van más allá de lo deportivo. Ellos, que conviven a diario en los entrenamientos, que comparten sacrificios y sueños, saben que la pasión por el deporte no reconoce “diferencias” por eso reclaman y exigen por la unión del deporte adaptado con el convencional: “Sería muy importante porque hay mucha gente que piensa que lo nuestro es recreo y no se da cuenta qué es lo que pasa” analiza Guillermo; “Sería bárbaro. Ojalá se pueda dar. Acá somos todos iguales y lo dije y lo sigo diciendo y lo voy a mantener siempre, no tienen por qué mostrar que la gente sea diferente” sentencia José.
Sus inicios, sus sentimientos, sus sacrificios, sus pensamientos y sus historias los muestran sin diferencias, con más puntos en común que en contra.

Nota de tapa de Revista RETO. Julio de 2006.

THE CANDIDATES CONTINUES THE ORAL FIGHT

Barack Obama and John Mc Cain changed crusade words in theirs acts. The Democrat Obama gave an international politics class to Mc Cain, and the Republican suggested that his opponent has not worked like a Senator. The final spring to White House is on fire.

The debates are not enough for them. They, The candidates, continue talking about the opposite and accuse each other.
Firstly, Barack Obama, Democrate candidate, became a teacher yesterday. He taught John Mc Cain about international politics. He explained that United States could not deal with North Korea because they had quadrupled their nuclear capacity, they had tested a nuke, they had tested missiles and they had pulled out of the nonproliferation agreement. Also, Obama added that they had sent nuclear secrets to countries like Syria.
What is more, the Democrate Senator compleined that the US’ actual finnancial crisis is because the Bush administrations had reversed course on this. So, in this case, acussed Obama that the Senator Mc Cain appared resistant.
Obama continued to attack Mc Cain. He suggested that the opposite do not know who are the enemies. In addition, he remembered when Mc Cain had said that the americans would not had met with Prime Ministre of Spain, José Luis Rodríguez Zapatero, because the Spanish people had been aligned with United States; namely, Obama asked himself, if the americans could not meet with their friends, Obama did not know they were going toe ad the World in terms of dealing with critical issues like terrorism.
Nevertheless, John Mc Cain made sure that Obama was a liar. The Republican candidate accused that his opponent had done in the past other things that he says now. Mc Cain explained that Obama had changed his position in this campaign ant the best way to determine where he had took this country was to examine where he had tried to take it in the past. Such as Obama had invited serious questioning by announcing from Mc Cain, he had questioned Obama’s policies.
He remembered when his opponent had called him a lia; instead the Republican answered these critic accused to the Democrate Senator that he had never argued the seriuos and legitimate questions he had been asked.
Then, Mc Cain told him that he did not need lessons about telling the truth to American people; but probably he would not have sought advine from a Chicago politician.
Finnaly, Mc Cain questioned that whatever the question, whatever the issue, there was always a back story with Senator Obama and he concluded that “all people want to know was what had this man ever actually accomplished in goverment? What did he plan for America? In short, who was the real Barack Obama?”.
The November 4th is coming soon. This day, American people have to decide which want: “the liar” or “the teacher”.

Written in November 2008.